Hacía mucho que no lloraba
que no sentía tanto pesar
que no tenía vacía el alma
y que mi cuerpo no daba más.
Fuimos lo que lloramos
en mil horarios tu funeral
sólo los necios te han ignorado
mas tú enseñaste a perdonar.
Eres la Iglesia y la Palabra
eres por ello, mi relación
con nuestro Dios a quien amamos
en lo profundo del corazón.
Fue tan viviente tu cuerpo en Cristo
que un día hermoso pude observar
tan suave mano, en papamovil
la que ya nunca podré olvidar.
Hoy sólo quiero sentirte santo
en una estampa o en un collar
y recordarte en cada instante
porque Juan Pablo sos mi "verdad"
Escrito el día de la muerte de J.P.II
Martha Wierzbicki Posse
